Por qué y cómo pueden las ciudades promover la Producción Social del Hábitat asequible y sostenible

¿Por qué y cómo deberían las autoridades locales apoyar la aparición de viviendas participativas asequibles en sus zonas? ¿Cuál es el papel de la vivienda social y del interés público en esta nueva oleada de proyectos que está surgiendo en toda Europa?

Nuestro socio urbaMonde y NETCO organizaron una sesión en el Festival Internacional de la Vivienda Social de Barcelona el 7 de junio de 2023. Puede encontrar la presentación aquí, y la transcripción a continuación.

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Sesión organizada y moderada por

• Pierre Arnold – urbaMonde
• Maite Arrondo – NETCO project

Panelistas

• Robert Temel, investigador en arquitectura y urbanismo y miembro de CO-HOPE Viena, Austria
• Pierre-Charles Marais, copresidente de Habitat Participatif France, Francia
• Charlotte Grosdidier, Responsable de Desarrollo, Departamento de Vivienda y Hábitat, Gran Lyon
• Rebecca Bosch, Coordinadora de Proyectos Europeos y Asesora Jurídica, Logement Bruxelles, Bélgica
• Jeroen Laven, Director de Vivienda, Ville de la Haye, Países Bajos
• Javier Burón, Director de Vivienda, Ville de Barcelonel, Cataluña

Robert Temel, Pierre-Charles Marais, Javier Burón, Pierre Arnold, Jeroen Laven, Charlotte Grosdidier, Rebecca Bosch, Maite Arrondo.

Lecciones clave para la elaboración de políticas

POR QUÉ: Los beneficios de la vivienda participativa para las ciudades :

• La Producción Social del Hábitat (PSH) o Vivienda participativa (VP) suele ser una iniciativa ascendiente, dirigida por ciudadanxs, que prospera allí donde el grupo puede comprar terrenos para construir o edificios existentes para renovar. Por lo tanto, es difícil de aplicar en ciudades que no cuentan con apoyo público para garantizar que estos proyectos sean asequibles y no especulativos.
• La experiencia demuestra que los proyectos de PSH tienen una calidad medioambiental y una eficiencia energética muy altas (a menudo superiores a las normas actuales), porque las personas construyen por sí mismas y, con inteligencia colectiva, toman las mejores decisiones.
• Del mismo modo, los grupos de PSH intentan espontáneamente generar una diversidad de hogares (edades, orígenes, composición, etc.) y a menudo incluyen viviendas para poblaciones vulnerables (solicitantes de asilo, inmigrantes, personas discapacitadas, madres solteras, estudiantes, etc.). Sin embargo, la diversidad de grupos de ingresos depende de la financiación pública disponible para cubrir la brecha en la aportación económica de los hogares con ingresos bajos.
• Los proyectos de VP suelen ser mixtos, con salas y actividades abiertas al vecindario, personas comprometidas con estilos de vida sostenibles (movilidad compartida, alimentación local, energías renovables, etc.) y solidarias con grupos vulnerables o procesos que afectan al barrio (gentrificación, COVID).

CÓMO: Apoyo público a la vivienda participativa

• En Barcelona, Bruselas, Lyon y Viena, la VP recibe ayudas de la ciudad o la región cuando los hogares cumplen los criterios para acceder a una vivienda social (estar por debajo de un umbral de ingresos, no poseer otra vivienda). Sin embargo, suele corresponder a las categorías de ingresos superiores del umbral de ingresos de vivienda social (rentas medias y medias bajas).
• Las organizaciones sin ánimo de lucro de VP pueden ser reconocidas como proveedoras de vivienda social, lo que les da acceso a subsidios directos y reducciones fiscales municipales, como las cooperativas de vivienda de Barcelona y el Community Land Trust (CLT) de Bruselas.
• Además, los grupos de VP pueden asociarse con arrendadores de viviendas sociales para crear proyectos mixtos (alquiler social + propiedad cooperativa o copropiedad en el mismo terreno), utilizando los conocimientos técnicos y las garantías jurídicas de estos arrendadores institucionales.
• El suelo público puede venderse a un precio reducido para la VP no especulativa, como en Lyon y Viena, o arrendarse durante 99 años con un alquiler simbólico, como en Barcelona y Lyon.
• El reconocimiento formal de la VP por parte de las autoridades y las garantías públicas para los préstamos bancarios generan confianza a los bancos para conceder préstamos a proyectos de VP.
• Los bancos públicos de desarrollo regionales, nacionales o europeos pueden contribuir a la financiación de proyectos municipales de desarrollo urbano que incluyan VP, como en Barcelona.
• Las licitaciones públicas que generan competencia entre grupos de PSH y con otros promotores sociales funcionan en Viena, pero no en Barcelona, donde el ayuntamiento prefirió elaborar un acuerdo con todos los promotores de vivienda social para que propongan un único proyecto por terreno público.
• Participar en un proceso de VP requiere un bagaje cultural y tiempo del que no siempre disponen los grupos de renta baja. Se necesita acompañamiento técnico y social externo para facilitar la formación del grupo de VP y el proceso de diseño con arquitectxs, promotores sociales, autoridades, etc. La "Fabrique de l'Habitat Participatif" (Fábrica de la PSH), subsidiada por el Gran Lyon, reúne a profesionistas acompañadores de PSH para trabajar con los grupos interesados y ofrece una ventanilla única para el diálogo con las administraciones públicas.
• La Fabrique de l'Habitat Participatif también trabaja con asociaciones de educación popular para fomentar proyectos de PSH en barrios que aún no son atractivos para el mercado inmobiliario.
• La confianza mutua entre los grupos de PSH y las administraciones públicas es la clave del éxito.

Notas: POR QUÉ y CÓMO promover la vivienda participativa

▶ Descargar notas adicionales aquí - página 4

Debate con los ponentes

▶ Descargar aquí - página 10

Preguntas + Respuestas, y Caja de herramientas para la Producción Social del Hábitat

▶ Descargue aquí las FAQ y el kit de herramientas de la PSH - páginas 13 y 18.